Testamento de un sonero

En la última semana he estado en dos entierros: el de un profesor de la Universidad y el de un sacerdote experto en Biblia que le daba clases a mi mamá. Este tipo de ceremonias me recuerdan un deseo que tengo hace años desde que oí por primera vez una canción de Ismael Rivera con la orquesta de Kako. Se llama 'Entierro a la moda':

"Mi entierro va a ser el acabóse

ahora verán cómo lo quiero

lucecitas, coronas, cero flores

pues yo lo que quiero es que lo gocen

también en mi caja yo quisiera

unos cigarrillos y algo fuerte

para seguir bebiendo y fumando

después que me lleven donde quiero..."

No fumo ni bebo pero desde 1988, cuando conocí esta canción, sueño que mi entierro no sea una sucesión de llanto y color negro.

Con todo el respeto acudo a los velorios y funerales. Es una ceremonia más para los vivos que para los muertos. Desde la muerte de mi padre entendí lo importante que es para muchos, incluyéndome, estar acompañados en esos momentos iniciales de tristeza y agradezco una vez más a todos los que nos acompañaron hace muchos años. En esa época ya venía imaginándome mi entierro pero hoy reconozco que no es una ceremonia para mí sino para los que me sobreviven y no debo decidir sobre la ceremonia que me hagan.

Sin embargo sí quiero que en algún momento suenen la canción que acompaña esta entrada y que pueden oir cuantas veces deseen. No pido que la toquen en la iglesia, no pido que me la canten cuando estoy entrando al horno crematorio, nada de eso. Pero tal vez en algún momento del velorio pueden sonarla, o tal vez quemar unos cds con ella y regalarla a todo el que asista, o simplemente colgarla en Internet como hago hoy y participarle a los acompañantes que esta era mi filosofía sobre los entierros.

"...Yo pienso que es un error
que aquel que vivió soñando
lo sepultemos con llanto
y sin canciones de amor..."

Como tantas veces en esta vida y en cierta forma parodiando a la película "Alta Fidelidad" (y al libro que la inspiró), hice el "top 10" de las canciones de funeral. Pero terminó siendo una más de mis selecciones musicales que recopila las canciones que quisiera se interpretaran en mi funeral, la banda sonora de mi entierro. Comienza con 'Testamento de un sonero' y son 14 canciones alegres que tenía en mi colección. Me falta la de Ismael Rivera. Antes de quemar el CD (cremar, en este caso) haré lo posible por conseguirla. No acostumbro bajar música de internet pero si alguien sabe dónde encontrarla podría mandármela a mi correo electrónico: enmediodelruido@gmail.com.

Para muchos hacer este trabajo de selección traerá la mala suerte o les parezca un poco loco. Los entiendo y por eso no voy a forzar a nadie a que me den un funeral que yo haya organizado desde este lado. Pero eso sí, "no quiero que nadie llore si yo me muero mañana". Espero que ese mañana esté muy lejos.

Mientras tanto, para ustedes, Testamento de un Sonero, del Conjunto Manguaré


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