En BBC encuentro la noticia de una encuesta sobre los libros aburridos que la gente no termina en el Reino Unido. En los resultados de la encuesta se disputan los primeros lugares James Joyce con su 'Ulises', Bill Clinton y David Beckham con sus repectivas memorias. Pero leyendo el artículo me sacudió la forma como se expresan del jugador de fútbol: Por supuesto que nadie se ha preguntado si la erudición de Beckham le alcanzó como para escribir su autobiografía, habida cuenta de que completar una oración con sujeto, verbo y predicado se ha convertido, en el caso del mediocampista del Real Madrid, en un auténtico desafío verbal. Cada vez que lo logra, los cronistas que asisten a sus comparecencias públicas suelen destacarlo casi con el mismo entusiasmo con el que escriben sobre uno de sus tiros libres. Habría que preguntarse entonces si, cuando se entere que su farragoso desaguisado no lo han terminado muchos británicos, se va a decepcionar a tal punto que va a abandonar todo in...