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No se hizo el caviar para la boca del cochino

Cuando iba a cine una vez a la semana descubrí que las películas clasificadas con cinco estrellas en la cartelera de El Tiempo eran para ver con precaución. A menos que fuera algo como El Señor de los Anillos o Toy Story, las películas con esa clasificación eran demasiado buenas para este profano que les escribe. Demasiado arte para mí, complejas, truculentas. Desde esa época tengo recelo con las de tres estrellas (pueden ser digeribles o no), las de cuatro son las preferidas y las de cinco deben tener la opinión de un tercero conocido antes de ir a verlas.

Hace poco murió Germán Espinosa y se ha hablado mucho de su novela La Tejedora de Coronas. Se la menciona como la mejor novela después de Cien Años de Soledad e incluso se llamó al escritor como el Nobel sin Nobel. Pues me decidí a comprarla y parece que va a ser una novela de cinco estrellas. Demasiado para mi. Según vi en mi primera aproximación, cada capítulo tiene un solo punto. El punto y aparte que da paso al siguiente capítulo. Todo lo demás son comas. Cada capítulo es una gran larga frase de muchas páginas. Al menos eso parece.

No niego que sea un trabjao fantástico, que en realidad pueda ser la mejor novela de la historia colombiana, pero no sé cómo me vaya a ir con ella.

Es que no se hizo el caviar para la boca del cochino. La culpa no es del caviar sino del cochino, obviamente.

PS: Hay unos cuentos de Espinosa que son fantásticos. El de "Noticias de un convento frente al mar" me pareció de lo mejor.

Comentarios

Anónimo dijo…
Sabes que no conozco ese escritor… voy a buscar algo de èl para leer…
Saludos amigo y lea el libro así cuenta que tal…
Jules dijo…
Uf. Yo también he tratado de entrarle a la tejedora, y he sido incapaz. Me quedo en los telescopios y zas, mi mente sale disparada en otras direcciones mientras mis ojos intentan seguir las palabras por la página.

Me imagino que quienes la recomiendan no fueron capaces de terminar de leerlo, o más bien, la ovacionan solamente para sentirse más tesos que la población promedio incapaz de pasar del primer capítulo.
Anónimo dijo…
sumerce es mi tipo de persona, la madre, no todo es para el cochino, eso es cierto
Chien, con toda seguridad haré mi mejor esfuerzo y les cuento pero el comentario de Medea no da muchos ánimos. Espinosa era un gran escritor Colombiano.

Medea, no me cabe la menor duda: muchos de los que la alaban no deben haberla terminado. Debe ser un trabajo el hijuemadre hacer una novela así y definitivamente no está hecha para todos. Lo malo es que yo soy de los que dejan los libros empezados si no lo atrapan. Mal pronóstico...

Señor Gerente: ¿una cosa más en la que nos parecemos?
Astrolabio-jsa dijo…
Tienes razón. La Tejedora de coronas tiene la misma forma de "El general en su laberinto", una frase por capítulo. La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) escogió en 1992 "La tejedora de coronas" como una de las obras representativas de las letras humanas, y la incluyó en su lista de "Obras patrimonio de la humanidad". Germán Espinosa fue eclipsado por Gabriel García Márquez, como tantos otros de esa y la siguiente generación (lo bueno del Nobel para Gabriel García Márquez, fue castrante para muchos escritores colombianos). Un gran escritor, Germán Espinosa, en todo caso. Abrazo.
Anónimo dijo…
Que tal hombre, como va? Por ahora mi blog estara quieto, un tiempo.. pero queria agradecerle el mensaje que me dejó, pronto nos veremos